Descripción
Territorio de uno mismo, de Odín Hernández Ortiz, explora el viaje cotidiano como demarcación de la memoria, un rastreo del yo y un inventario de la fuga. El cuerpo urbano y la ciudad íntima domestican la incertidumbre en estos poemas que viajan entre barcos, nubes y lluvia. ¿Existen las inseguridades definitivas? ¿Es cierto que los astros están hechos de barro? La poesía deambula con músicos que regalan serenatas urbanas.
Un canto que interroga la identidad y la transitoriedad, con la mirada afilada de quien sabe que el tiempo es un paisaje que se desvanece.
